MARCELA CABUTTI
Muestra Museo Histórico Municipal de Balcarce
Inauguración: 3 de septiembre 2022
Cierre de la muestra 2 de octubre 2022
Horario de visita L a V de 8 a 16 hs. SA y Do de 15 a 18 hs
Dirección Cerro el Triunfo, Balcarce.

Texto de Sala 

Jamás podremos comprender una planta sin haber comprendido lo que es el mundo” 

Emanuele Coccia.


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Helecheros 

Desde que supe sobre el oficio de los Helecheros no pude contener la curiosidad. Quizás haya sido que me encanta como suena la palabra HE- LE- CHO al pronunciarla; y porque mi niñez estuvo rodeada de flores y de plantas. Recordé cómo los helechos se usan en las coronas de los muertos y en los cementerios… Esa parte no me gustaba de chica; por suerte, mi abuelo florista hacía pocas coronas. Detestaba los helechos “serrucho”, que eran los más codiciados.
Decidida, llamé al Vasco y el abanico de trabajadores empezó a abrirse. Conocí a los primos Daniel y Héctor, cuarta generación de Helecheros y nietos de la primera mujer helechera: Doña Ángela. Ellos me contaron que había sido el inmigrante italiano Forza quien introdujo el oficio al pueblo, en los años 60. Luego, ellos mismos comenzaron a venderlos en los mercados de flores de La Plata y Buenos Aires.
La curiosidad del inicio desembocó en una jornada de trabajo con los Helecheros, los acompañé para ver y sentir en el propio cuerpo el peso de un modo duro de subsistencia. El encuentro fue pautado a las 4 de la mañana, al costado de la Ruta 226 que une a Balcarce con Mar del Plata. En plena oscuridad, apenas se veían dos faroles encendidos cuando tuve que abandonar mi auto por el barro de la lluvia de la noche anterior. Continué el viaje nocturno entre muchas personas apretadas, en una camioneta agitada como una coctelera.
No fui sola, pedí ayuda para poder registrar lo que sucediera, el esfuerzo físico de subir las sierras estuvo acompañado por la toma de fotos y videos. Las imágenes se ofrecían pero, sobre todo, a través de la escucha y el sentir a cada paso pude percibir al suelo, entender la riqueza de esa tierra negra y liviana, de capas de turba milenaria, estratos germinales para esporas esparcidas por el aire. El viento frío siembra y reproduce helechos, musgos y líquenes, testigos de las primeras formas de vida que poblaron y dominaron la superficie terrestre hace millones de años. Sentí la eternidad del tiempo en las manos.
Vi cómo entre los huecos de las piedras, llenas de motas de colores como lunares, crecen seres verdes acurrucados y escondidos. Sus bulbos con raíces escapan de la hoz rápida y segura de los Helecheros, pero son al menos entre 10 y 12 las ramas que caen, cuidadas y leves. Un hilo amarillo y ágil las transforma en prodigiosos y seductores “pinitos”, que son acostados sobre un lienzo mitad hacia un lado, mitad hacia el otro, como los árboles entre campos vecinos. Luego, una soga los mezcla y los aprieta sin dañarlos. Toda junta y ceñida en un fardo, la liviandad inicial de las hojas se transforma en bulto, en una forma gordosa, por gorda y esponjosa, que los hombres hacen trepar con fuerza sobre sus espaldas. Y como orugas gigantes de 70 kilos empujan de atrás y aceleran los pies ya veloces de los guías, en un descenso obligado hacia el vehículo que las transportará.
El día de trabajo de los Helecheros culminó antes del mediodía con el sol casi alto. Todos los seres juntos regresamos a la ciudad para retomar la rutina al día siguiente. En cambio, el viaje final de los helechos, los pinitos verdes, será en dos semanas para festejar a los muertos y adornar otras vidas. 

Marcela Cabutti, 2022.


AGRADECIMIENTOS

Familia Zarategui 
Municipalidad de Balcarce
Esteban Reino, Sebastián Vidal, Juan Best.
Museo Histórico de Balcarce
Cesar Gustavo De Gerónimo, Irene Rodríguez, Sonia Van Vliet, Beresiarte Silvia, Romina Contrera. Celeste Ridao.
Asociación Civil Centro Cultural Salamone, El Matadero
Ana Ramos


COLABORADORES

Gustavo Muñoz, Martín Oscar, Santiago Pando ,Claudia Bruschetti, Ale y Horacio Fontana, Mory Said, Inta, Federico Miri, Adolfo Ibargüengoitia, Marcelo Bruschetti, Sandra Bruschetti, Rosa María Collavita, Emanuel Pastorino, Carlos Ogando, Mario Angelini, Eduardo de Gracia,  libros de Jorge Dágata y Malena Sabatino.

Colección Fasy, Gastón Wyslawsky, Silvina Rancich, Silvina Cavallaro, Carlos Servat, Natalia Pastorino, Mario Moltedo, Fausto Tolosa, Tercera Persona editorial (Juan Pablo Montero y Leticia Barbeito), Mariela Vita, May Borovinsky, Alvaro Rufiner, Carolina Muzi.


Contexto territorial

Geografía precámbrica
El proyecto a trabajar artísticamente en el territorio serrano de Balcarce, surge a través de una invitación en el año 2018, que se concreta durante la Pandemia.
Desde el punto de vista geográfico, el Sistema de Tandilia, incluida Balcarce, forman parte del Cratón del Río de Plata, junto con la provincia de Entre Ríos, la Isla Martín García, parte de Uruguay y Brasil. Los cratones son las placas tectónicas y basamentos más antiguos del planeta, donde está apoyada la corteza terrestre exterior. El Cratón del Río de La Plata y el Cratón de África, en las actuales ciudades de Balcarce y Namibia, formaron   parte del continente de Pangea y Gondwana hace millones de años. Los estudios de datación de las piedras en ambos lugares (hoy tan distantes), comprueban que ambos territorios poseen el mismo origen mineral y demuestra que estuvieron unidos en un pasado muy remoto.
Las sierras que rodean la ciudad de Balcarce son 7 y recibieron los nombres de: Cerro El Morro, Sierra Larga y Sierra La Chata, Sierra la Barrosa incluido el Cerro El Triunfo, Sierra la Vigilancia y la Sierra la Brava, Sierra del Volcán (Puerta del Abra), Sierra Bachicha que comprende Cerro Primero, Cerro Segundo, El Paulino, el Sarnoso o Heusser y por último el cerro Cinco Cerros, que comprende a su vez, El difunto, El Partido, La Paja, Piedra Alta y el Quemado.
La excepcionalidad del sitio Punta Tota donde el territorio de Argentina “nació” geológicamente, al pie de la Sierra Bachicha, consiste en la existencia de rocas de origen Precámbrico de 2200 millones de años de antigüedad y granitos de 1700 millones de años. Allí se encuentran también, vestigios de sedimentos marinos de un antiguo mar extinto: todos estos tesoros geológicos, a solo pocos metros de profundidad, permiten “leer “huellas en el terreno del extenso proceso temporal de formación de la superficie terrestre. Las rocas más abundantes son las ortocuarcitas: secuencia sedimentaria denominada Formación Balcarce, la mal llamada “Piedra Mar del Plata”.
Inmediatamente lo vínculo con el tiempo: el tiempo geológico, el tiempo histórico, los tiempos individuales, sociales y sobre todo el tiempo de la naturaleza conservada y degradada. 
Pisar las rocas del pasado y las del futuro. Sentir la extrañeza definida por millones de años en nuestro cuerpo mientras también ejercitamos la memoria, en un recorrido consciente propuesto, configurado por piezas modeladas por la fuerza de la naturaleza, no es casualidad que durante la Pandemia estos paisajes sean revisitados y disfrutados.


Helecheros

Los helechos, musgos y líquenes son testimonios vivos de las primeras formas de vida que poblaron y dominaron la superficie terrestre hace millones de años. En regiones como Balcarce y algunas pocas zonas de la Patagonia, ricas en turba milenaria, el helecho crece espontáneamente entre las piedras y se reproducen a partir de la propagación de las esporas esparcidas por el viento. 
Allí surge el oficio de los helecheros quienes durante los años 60 según cuenta Daniel Lantaño y su primo Héctor Molpeceres (ambos cuarta generación de helecheros). Quienes descubren de la mano del inmigrante Gerardo Forza, que en Italia los ramos de flores se hacían incluyendo ramas de helechos, es así como decidieron empezar a recolectar en la zona y venderlo al mercado de Flores de La Plata y de Buenos Aires. De este modo la actividad se convierte en oficio y medio de subsistencia de algunas de las familias de la ciudad. 
La recolección se hace todo el año, se corta con mucha habilidad y rapidez con una hoz, cuidando de no dañar las raíces. Los ramos se arman con de   10 a 12 ramas, pesan alrededor de 800 gramos y se los acomoda en forma de “pinito”, que luego disponen sobre un gran paño que atan y dentro del cual envuelven alrededor de 70 kilos de estos vegetales , que bajan con gran esfuerzo físico entre las empinadas sierras.


Agradecimientos

FAMILIA Zarategui
Helecheros: Héctor Molpeceres, Daniel Lantaño, Esteban Lantaño, Juan Barrios, Marcelo Contreras, y Heber Noordermer.
Municipalidad de Balcarce
Intendente: Esteban Reino
Subsecretario de Turismo: Sebastián Vidal
Colaboradores: Juan Best, Manuel Pastorino, Adolfo Ibargüengoitia
Subsecretario de Cultura y Educación: Cesar G. De Gerónimo.
Coordinadora de la Casa de la Historia y la Cultura del Bicentenario: Irene A. Rodríguez
Equipo de trabajo Museo Histórico Municipal de Balcarce: Beresiarte Silvia, Sonia Van Vliet, Romina Contrera, Celeste Ridao.